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domingo, 25 de agosto de 2013
Consejos para escritores -Anton Chejov-
jueves, 22 de agosto de 2013
miércoles, 14 de agosto de 2013
lunes, 12 de agosto de 2013
La cura: es viernes, estoy enamorada.
Una estrella el aloe en tu terraza
permanece firme su constelación voraz: crasas
cactus y cactáceas
abiertas a la tarde en dignidad. No hay
altruismo para el día a día, la helada o el viento norte en su caída
aunque ya todo sea resto -plusvalía- suavemente florecida
su incomodidad. De ahora en adelante buscarás
ligereza, liviandad
machacando a la manera de esos globos
fiesteros que al ascenso vemos a lo lejos
volar liberados por otros quién sabe hacia dónde
con augurios de buena fe o sencillamente
cierta felicidad. Más preciso: esos que aman
a la persona correcta y lo saben o mejor
todavía quienes aman
incorrectamente lo saben y deciden
amar igual. Criaturas raras
estas flores carnosas: rosas intensos, ásperos violáceos y espinas
claro que flores al fin, flores igual. Su aparición inesperada
este corto trajinar. Cada tarde
un final con su principio
el atardecer al oeste siempre y definitivamente
la pérdida resulta simple y a perder se aprende. Caerán las flores
algunas damas caerán: algo manchadas
al piso y despatarradas. Pero este viernes
mejor elegir ese instante del aloe
brillante contra las sábanas aireadas
su sincronización ordenada: tanta fe
para mantener una estación, esta temporada.
permanece firme su constelación voraz: crasas
cactus y cactáceas
abiertas a la tarde en dignidad. No hay
altruismo para el día a día, la helada o el viento norte en su caída
aunque ya todo sea resto -plusvalía- suavemente florecida
su incomodidad. De ahora en adelante buscarás
ligereza, liviandad
machacando a la manera de esos globos
fiesteros que al ascenso vemos a lo lejos
volar liberados por otros quién sabe hacia dónde
con augurios de buena fe o sencillamente
cierta felicidad. Más preciso: esos que aman
a la persona correcta y lo saben o mejor
todavía quienes aman
incorrectamente lo saben y deciden
amar igual. Criaturas raras
estas flores carnosas: rosas intensos, ásperos violáceos y espinas
claro que flores al fin, flores igual. Su aparición inesperada
este corto trajinar. Cada tarde
un final con su principio
el atardecer al oeste siempre y definitivamente
la pérdida resulta simple y a perder se aprende. Caerán las flores
algunas damas caerán: algo manchadas
al piso y despatarradas. Pero este viernes
mejor elegir ese instante del aloe
brillante contra las sábanas aireadas
su sincronización ordenada: tanta fe
para mantener una estación, esta temporada.
Poema del libro Volumen 1 (2010, Peak a Boo) de Andi Nachon
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